Para llegar a la orilla occidental de la Laguna de Atitlán tienes que ir por caminos sinuosos y a veces empedrados por unas 3 horas saliendo de Antigua. Al llegar a la carretera que va por el perímetro de la gran laguna, podrás observar unas magnificas vistas del agua y las montañas en su alrededor. Hay varios miradores donde puedes para un rato para tomar fotos y comprar unos recuerdos si solo estas de pasada. Si tienes un poco de tiempo, entonces es mejor ir al pueblo de Chichicastenango. Este pueblo es lugar del mercado artesanal más grande de Centroamérica en donde todo el centro de la ciudad se convierte en mercado todos los jueves y viernes. Hay varios textiles y recuerdos Mayas a muy buenos precios. En este mercado, los vendedores son persistentes y a veces te siguen para que les compres algo. En el centro del mercado también hay una iglesia única que tiene influencias Mayas y es un bonito lugar para tomar un corto receso de explorar el mercado.
Los Mayas Modernos
Hay varios pueblos en el alrededor de la Laguna de Atitlán con varias opciones diferentes de hospedaje desde hoteles grandes en pueblos turísticos como Panajachel a estadías con familias en los pueblos más pequeños como San Jorge La Laguna. Los recomiendo una estadía con una familia si quieren una experiencia autentica de la cultura Maya. En esta experiencia, una familia Maya te invita a su casa y te prepara una cena y la familia donde me hospede me dejo ayudarles a hacer unas tortillas. Las familias hablan español y un lenguaje de los Maya. En el encuentro hay la oportunidad de aprender unas palabras del lenguaje de los Mayas. La familia donde me hospede hablaban Kaqchikel y fue una experiencia interesante para aprender sobre su cultura, tradiciones, y el trabajo que hacían.
Santiago Atitlán
Para visitar los pueblos mas populares de la laguna, la manera más rápida y conveniente es tomar un tour en lancha. Los precios varían dependiendo cuantos pueblos quieres visitar y es más barato si vas en grupo; para nuestro grupo de 12 personas, nos costó 12 GTQ1 por persona. Asegúrate de confirmar los pueblos con el conductor de la lancha porque puede ser que acordaron algo con el vendedor, pero el conductor de la lancha quizás tiene una ruta que siempre hace. La lancha salió de Panajachel y la primera parada fue en el pueblo de Santiago Atitlán. Para tener una idea de que tan grande es la Laguna de Atitlán, nos tardamos unos 45 minutos en llegar ahí en la lancha; recorriendo una distancia de unos 15 km. El pueblo aún se está desarrollando y tiene calles pequeñas donde hay mototaxis para movilizarse por el pueblo. Es una caminata corta para llegar al Parque Central; donde hay una plaza rectangular con una iglesia hermosa en un lado y edificios de una escuela en el alrededor. También hay varios restaurantes y tiendas artesanales en el pueblo que se puede visitar antes de regresar al muelle.
San Juan La Laguna
Después de subirnos a la lancha, nos hicimos alrededor de 30 minutos para llegar al pueblo de San Juan La Laguna. Al igual que Santiago Atitlán, el pueblo tiene varios restaurantes y tiendas artesanales. Unas tiendas artesanales tienen un taller donde ofrecen tours en donde te explican el proceso de como hacen los textiles usando plantas y otros materiales. También de dan un chance para intentar a hacer un hilo usando el algodón natural lo cual es mucho más difícil de que parece cuando hacen la demonstración. Al final del tour, nos demuestran como tejen una hamaca u otro producto. Algunos de estos tours son pagados, pero hay unos que son gratuitos; en general son los que son administrados por una cooperativa de mujeres trabajadoras. Después de esta sesión, nos regresamos a la lancha para continuar a nuestro último destino.
San Pedro La Laguna
En la lancha nos hicimos otros 15 minutos para llegar al pueblo de San Pedro La Laguna. Este pueblo es más grande y habían mas restaurantes, bares, y tiendas. Lo interesante de este pueblo es que tiene una gran influencia Judía. Nuestro guía nos conto que hay una comunidad judía que se a mudad a este pueblo y por eso hay restaurantes y tiendas judías. Había un pequeño mercado y una plaza donde se puede comprar fruta y vegetales. Un postre delicioso e interesante que encontré fue un fruta bañado en chocolate y congelada como helado. Para obtener una magnifica vista del pueblo y la laguna, puedes ir a una iglesia – Primera Iglesia Bautista. Se puede subir a la terraza de donde se puede tomar unas buenas fotos y el acceso es gratuito.